lunes, 14 de agosto de 2017

Solteros "somos"...que no "estamos"



 He decidido escribir este artículo, porque dando una vuelta por internet, he podido comprobar la cantidad de apoyo que hay para solteros “circunstanciales”. Artículos de apoyo de tipo: ¿acabas de salir de una relación? ¿ahora estas soltero? ¿no sabes vivir siendo soltero?. En fin, a lo que voy; no encontré nada relacionado con los solteros de verdad, los que lo “somos” y no “estamos”. Con ello quiero decir, que existen esos extraños sujetos que no hemos tenido pareja en nuestra puta vida o que tuvimos algo parecido incalificable, o algo que duró un verano o algo que paso hace eones, y somos unos olvidados, renegados del diablo y parece que nadie se acuerda nunca de nosotros (“si estas sola es porque quieres” ¿¿??). 
Por lo tanto, ser solteros ya no es una cuestión de “estarlo” sino que lo “somos”. No que lo “estemos” entre relación y relación por 5 minutos rollo “¡Cómo mola ser super free! ¡iuuu!” y a los tres segundos ya tengo pareja nueva.  El “ser” soltero como un estado natural; somos lobos esteparios en tu ciudad. Se que hay más gente como yo, se que no soy la única pringada a la que le van y fueron tan infinitamente mal las relaciones que lleva sola toda su puta vida. Hay más como yo, lo se, lo presiento (¿Holi?)

Normalmente, el estar sola/soltera es algo que me la viene soplando, una vez que superé determinadas fases joven-adolescente-dramática, en la que todo el planeta tierra se iba emparejando progresivamente (menos yo, of course) . Creo que también pase ya por la fase de culpa, del que tiene ella que no tenga yo, de coño pues tampoco soy tan fea, coño que mala suerte tengo, etc. Pero ¡ey! ¿y si la culpa no es mía? ¿y si todo se debe a un cúmulo de circunstancias, alineación maldita del cosmos, y no es que yo esté haciendo sistemáticamente algo mal? ¿y si simplemente no encuentro a nadie que sea lo bastante compatible conmigo ó no coincidimos en el momento/ evolución vital adecuado? Que ya está bien de flagelarnos, vamos digo yo. Que alo mejor hay gente que naturalmente está siempre emparejada y los hay que naturalmente estamos con nosotros mismos.

Lo mejor es cuando te sueltan perlas de “mejor sola que mal acompañada” (suele venir de tu amiga que vive con su novio en una relación maravillosa, sana y feliz desde hace 4 años) o el ir de cena/fiesta/fin de semana con tu grupo de amigos en “Parejeo mortal parte IV y tu con estos pelos”, o  el “estas sola porque quieres” (esta es mi favorita). Bueno sí, hasta cierto punto. Siempre tuve claro que iba a acabar sola viviendo con mis gatos,  pero coño, ¡¿ya?! Pensé que sería un poco más tarde (puta bida, tete).

Supongo que todas estas reflexiones llegan cuando una se cansa de despertarse en futones de desconocidos (aunque de eso últimamente poco; Gandalf debe haberse vuelto a instalar en la entrada con su ¡no puedes pasar! Y a ver como lo largo de ahí), a la eterna duda de si seguiré soltera hasta el fin de los tiempos y encontrarán mi cadáver en estado avanzado de descomposición medio devorado por mis pastores alemanes y mis Maine Coon machos de 12 kilos.  Bueno, la cuestión, que es jodido, muchas veces es muy jodido, sobretodo porque a veces sientes que lo eliges, otras veces dices que lo eliges para quedar de guay e independiente, pero es totalmente mentira y ya llorarás luego en casa con dignidad, otras tienes claro que lo eliges y otras simplemente aceptas que puede que ese sea tu destino. En fin, que sed fuertes, si podemos con la soltería crónica y arraigada podremos con todo. Que a veces es chungo y dan ganas de ponerse a gritar de forma dramática a lo Estela Reinols “¡Que sola estoy! ¡QUE SOLA!”, pero luego se te pasa y ves lo bueno, del estilo de no tengo que rendir cuentas a nadie, solo me tengo que preocupar por mi y mi futuro incierto, hago lo que quiero con mi pelo, nunca sabe una con quién se puede acabar liando, etc.  Que supongo que al final la vida es ser capaz de ser feliz con hostias o sin ellas. Que estar soltero está sobrevalorado, que tener pareja está sobrevalorado, que viajar está sobrevalorado y que cualquier cosa que no puedas tener aquí y ahora, está sobrevalorado y la duda siempre llegará con aquello que no tienes, a lo que renunciaste o nunca pudiste tener. Ahora mismo estoy en un momento existencial de mi vida y la verdad, es que paso de todo ya, y paso de rallarme por este tema, pero antes quería dejarlo por escrito y darle ánimos a otros lobos esteparios en situación de soltería crónica y arraigada. “Bueno, tu tranquila que ya te llegará..” ¿el qué? ¿la muerte? Alo mejor lo que me llega es una ETS así que dejar ya de joder con eso, con el ya te llegará o llegará cuando menos te lo esperes. Sí, pues eso, como una ETS. Así que “Be water my firend” y dejemos las lamentaciones para los creyentes, que todo se puede exprimir y de todo se puede sacar un lado divertido y ser la tía soltera, graciosa y borracha de todas las fiestas en “Parejeo mortal: el retorno”. Así que resistid, que no es lobo todo lo que muerde.

miércoles, 31 de agosto de 2016

El dolor de recordar



Creo que la clave no está en intentar olvidar a esa persona que amamos profundamente en nuestro pasado. Precisamente porque la amamos, llegó tan profundo que tratar de sacarla es tarea imposible. Por eso pienso que ahí es dónde se nos escapa la energía, pues lleva muchísima tratar de olvidar. Creo que la clave no está en tratar de olvidar a esa persona, sino en aprender a vivir con su recuerdo. No va dolor siempre, no va a formarse un nudo en tu estómago cada vez que lo recuerdes. Pero con el tiempo, con la paz adecuada, con la conciencia adecuada de que todo pasa, seguirás recordando, seguirás pensando que estará haciendo ahora, sí pensará en mi. Pero de forma distinta, sólo como ese recuerdo que te acompaña. Nunca olvides. Persiste, continúa, integra, pero no olvides tu historia o estarás condenado a repetirla.  

jueves, 17 de marzo de 2016

La lucha sigue



Solamente sabia una cosa con seguridad: que no podía rendirme. En el momento en el que lo hiciese estaría perdida. Caer en la desesperanza suponía caer también en la desidia. La marea subiría y acabaría con todo.

Así que una forma apta y lógica de supervivencia es continuar la lucha aunque una tras otra se pierdan las batallas. En Psicología existe un fenómeno conocido como "Indefensión Aprendida". Esto supone que, el sujeto, a base de intentarlo todo recibiendo siempre la misma respuesta, simplemente deja de intentarlo. Se deja caer en la orilla y arrastrar por la marea. 
¿Por qué es tan grave caer en este estado de sumisión vital? Porque la vida, y por ende todo ser viviente, estamos sujetos al cambio. Nada permanece, nada es inmutable. Por lo que lo que nos funcionó en el pasado puede no funcionar en el presente y viceversa. Por lo que seguir intentándolo forma parte del juego. Si ahora no lo logras cambia de técnica. Si ahora no lo logras, espera, pero permanece siempre en la línea de salida.


Revisar cada día cuáles son nuestras opciones es una buena forma de continuar. Si no se puede seguir por una vía continuar por otra. Las posibilidades están ahí, aunque muchas veces no podamos verlas. Estar motivado supone estar aleta. Tener la energía mental y física que se necesita para hacer las cosas, por muy sencillas que parezcan a simple vista. Estar motivado supone ante todo, querer intentarlo. Las posibilidades de fracasar siempre van a estar ahí, acechando. Thomas Edison no logró crear la bombilla con un solo intento. El arma de la perseverancia es tan fuerte que nos puede permitir lograr lo impensable. Tener miles de respuestas negativas pueden ayudarnos a aprender, a tener experiencia, a lograr la sabiduría. Y sólo necesitamos que una sea positiva. 

Así que, ¿merece la pena vivir luchando? O por el contrario, ¿ Merece la pena dejarse arrastrar por la caprichosa marea? 

martes, 23 de febrero de 2016

La Capacidad de Automotivarnos

Siento, luego existo. 


¿Hay algo mejor que ser capaz de motivarse a uno mismo?

Aunque pueda parecer algo lógico y sencillo, a veces no pensamos que la falta de motivación es nuestra responsabilidad y que siempre va a tener que ver con como percibimos la realidad que nos rodea. A veces pensamos que necesitamos la palmadita en la espalda para saber que estamos haciendo las cosas bien y que nos estamos esforzando lo suficiente. Pero, ¿y si no la recibimos? ¿significa que valemos menos?

No todos los padres o ambientes familiares, crían a sus hijos de la misma manera. Hay criadores que utilizan más el refuerzo positivo, otros el castigo y otros directamente no utilizan nada (es lo que conocemos como negligencia). Es injusto pensar que muchas rasgos de nuestra personalidad quedan marcados por como nos educaron y nos motivaron nuestros padres. Por como nos dijeron o no nuestros profesores que valíamos o no valíamos para lo estudios. Por como nuestros compañeros de clase nos dijeron que éramos o no éramos guapos. ¿Hasta que punto debería ser esto determinante de las personas que somos ahora? ¿Qué tus padres no estén orgullosos de ti supone que tú no tengas que estarlo de ti mismo?

Otra cuestión tiene que ver con las expectativas que tiene cada uno. No hay nada comparable a descubrir un día que nadie está aquí para cumplir con las expectativas de nadie. Eso puede suponer una liberación. Por ejemplo, el hecho de que dejemos de luchar por que nuestros padres estén orgullosos de nosotros. Ese orgullo es completamente subjetivo. Es subjetivo porque cada uno tiene sus valores, y nuestros padres pueden tener unos valores que poco tengo tengan que ver con los nuestros. Puede que el orgullo de nuestros padres sea que nos casemos y tengamos hijos y un buen trabajo. Pero, ¿y si no es el nuestro? ¿y si por lo que sea nunca lo logramos?
Vivimos en sociedad. Es evidente. Es cotejado una y otra vez por estudios científicos, el hecho de que nos necesitamos unos a otros para sobrevivir, que un ser humano sano y "normal" se relaciona con su entorno de forma sana y "normal". Pero ello no implica dejar que nos invadan. Con ello quiero decir, que no debemos dejar que la opinion de otros y que las expectativas de otros nos importen y nos afecten más que las nuestras. Que YO soy la persona más importante para MI. Que ello no implica egoísmo ni individualismo. Significa que si yo no tengo una buena relación conmigo, sino respeto mis propias necesidades y mis propias expectativas, no voy a poder tener una relación con el medio sana y "normal". Que si y no soy capaz de motivarme a mi mismo, ¿quién me va a motivar? ¿Las expectativas de mis padres? ¿La sociedad de consumo? ¿Un día una cosa y un día otra?

¿Nos debe importar que otros sean felices con mis logros? Por supuesto. Pero tener en cuenta los sueños de nuestros padres respecto a nuestra vida y lo que querrían que fuésemos, no es determinante. No es la verdad absoluta, el camino correcto o cómo deberían ser las cosas.

Tengámoslo claro: las expectativas de los otros son las suyas, no las nuestras.

lunes, 21 de septiembre de 2015

Los padres de la Sexología


Simplemente, quiero responder una pregunta: ¿Qué ocurre en el cuerpo durante el sexo?


William Masters (1915-2001) y Virginia Johnson (1925- 2013) decidieron investigar el sexo desde una perspectiva que no se había usado: mediante la observación directa y el análisis estadístico.
Formaron una pareja de investigadores de los más compatible y prolifera, publicando La respuesta sexual humana (1966), Incompatibilidad sexual humana (1970) y El vínculo del placer (1975), obras fundamentales para la sexología moderna.

A pesar de lo prejuicios de la época, fueron capaces de acabar con mitos dañinos para la plenitud sexual de las personas y poder así contribuir a la educación sexual y más importante que eso, la importancia de recibir una educación sexual. 
Pioneros en la terapia sexual, llegaron a la conclusión de que los problemas sexuales deben ser tratados en pareja, ya que los problemas suelen darse en el acto sexual en pareja y no por separado. así observaron, que muchas mujeres que no podían tener un orgasmo con su pareja o disfrutar del sexo, sí que eran capaces de hacerlo en solitario. Facilitaron la creación de clínicas en Estados Unidos que tratasen estos problemas hasta entonces tabú. También hicieron la afirmación de que la mujer tenía mayor capacidad de placer que le hombre, lo que fue un auténtico escándalo dado el modelo patriarcal y represor de la época donde no era bien visto que una mujer disfrutase del sexo. 

Uno de los mitos que derribaron fue el supuesto orgasmo vaginal en las mujeres. A base de observación y registros fisiológicos, descubrieron que no había dos tipos de orgasmo en la mujer, sino solo uno: el clitoriano. Este descubrimiento permitió a la mujer conocer su cuerpo y experimentar orgasmos durante el coito mediante la estimulación de clítoris, o a no pensarse frígida por no llegar al orgasmo exclusivamente durante el coito (contrario a la teoría de Freud de que la mujer alcanzaba su plenitud exclusivamente a través del coito vaginal).
Con su investigación con los homosexuales, descubrieron que a nivel físico las relaciones sexuales de homosexuales y heterosexuales son las mismas, por las que su tratamiento tiene que ser el mismo y sus disfunciones y problemas son parecidos. 

Su aportación no fue solo importante para el avance de la ciencia, sino para la mejora de la vida de las personas al ayudar a alcanzar la plenitud sexual, la resolución de conflictos sexuales y la importancia de conocer nuestros cuerpos y disfrutar de ellos. Una educación sexual es tan importante como una educación en el auto-cuidado, la alimentación y el ámbito emocional. 

jueves, 27 de agosto de 2015

Los Problemas como Ilusiones

"Dame la sabiduría para saber las cosas que puedo cambiar y las que no, y el valor para cambiarlas"

Sí trabajamos en el momento presente, debemos darnos cuenta de inmediato de una rotunda afirmación: no existen los problemas. Solo hay situaciones, situaciones que debemos enfrentar o debemos dejar como están siempre que sean aceptadas e integradas.
La mente es la que crea los problemas, y los problemas necesitan del tiempo para sobrevivir. Sí los problemas necesitan del tiempo para sobrevivir, significa que no pueden sobrevivir en el ahora. Cuándo nuestra atención está plenamente concentrada en el ahora, es imposible que existan los problemas.
Existe una situación que debe ser afrontada y aceptada que podré modificar en la medida de mis posibilidades, pero eso no convierte automáticamente la situación en un problema, sino que es algo que hace nuestra mente egoísta. A la mente le encantan los problemas porque le aportan una identidad; hacemos de los problemas parte de nuestra identidad. A veces nos agobiamos y centramos en las cosas que tenemos que hacer en el futuro sin resolver realmente nada y olvidándonos de lo único que podemos hacer AHORA.

Cuando nos creamos un problema, nos estamos creando dolor. Y cuando creamos dolor no es solo dolor para nosotros mismos ya que vivimos en sociedad. Estamos creando dolor para todas las personas que nos rodean añadiendo dolor al dolor universal por medio de la negatividad de los problemas. Basta con tomar una sencilla decisión: no voy a generarme más dolor.
Ante situaciones donde hay falta de tiempo no nos generamos un problema, sino que es una situación que ha de ser resuelta de inmediato, precisamente porque no disponemos de tiempo para convertir la situación en un problema. Además esa acción es mucho más efectiva que la que se deriva de cuando la mente trabaja y trabaja sobre un problema.

Muchas veces hemos de ser conscientes de lo importante que es el uso del lenguaje. Al igual que el uso del lenguaje es vital para lograr la igualdad de género, lo es para referirnos a nuestro mundo emocional. No es lo mismo decir que tenemos un problema a decir que estamos en una situación complicada y desde luego, no es lo mismo "tener" que "estar", no es lo mismo "problema" que situación". La palabra problema conlleva negatividad, mientras que la palabra situación es neutra. El lenguaje no solo es vital a la hora de relacionarnos con los demás, sino también a la hora de relacionarnos con nosotros mismos.

martes, 28 de julio de 2015

El Poder de la Mente


"Sí sabes dónde mirar, lo encontrarás en todas partes"


Existen varias corrientes en la Psicología. Según la Psicología Cognitivo - Conductual, el ser humano tiene la capacidad de controlar su mente, es decir, sus pensamientos. Se cree que la emoción va ligada al pensamiento. Esto supone que sí soy capaz de "controlar" mis pensamientos, voy a poder controlar mis emociones. Sería cómo decir que si estas triste es porque quieres o porque no sabes sustituir tus pensamientos negativos por otros positivos. Vivir en positivo es, por tanto, la clave de la felicidad. Por ello, una de las técnicas más empleadas en este tipo de terapias es la llamada reestructuración cognitiva.

Si pasamos a analizar esta cuestión bajo otros puntos de vista, nos encontramos con teorías completamente opuestas. Desde la Psicología Transpersonal, dicho "control" mental no existe.  Se comprenden los pensamientos como "algo que suceden" no como "algo que yo provoco".  Sería algo así como el sistema circulatorio. Puedo alterar el flujo sanguíneo pero jamás detenerlo, sucede al margen de mi voluntad. ¿Qué supone esta forma de concebir la mente humana? Supone que no existe el control desde un punto de vista estricto y conductual. Supone, que la solución no está en controlar los pensamientos, sino en observarlos y hacerlos conscientes.
En terapias de tercera generación, se utiliza para explicar el funcionamiento de la mente la metáfora del tablero de ajedrez. En él, hay piezas negras y blancas jugando una dura partida de contrarios: los pensamientos negativos y los pensamientos positivos. Entonces, ¿yo quién soy? Yo soy el tablero donde sucede todo, soy el que observa. La paradoja se da en que cuando dejo de tratar de controlar lo que está pasando, lo que estoy pensando, lo que está sucediendo en mi interior y me limito a observarlo, las emociones negativas acaban por disolverse. Hay que saber cuando luchar y cuando dejar de hacerlo.

La persona que más me enseñó acerca de este tema o más bien, me mostró el camino para aprenderlo de mí misma, es el líder espiritual Eckhart Tolle. Situando todo nuestro poder en el momento presente, Tolle señala que podemos acceder al Ser, a lo que subyace a todo lo manifiesto, a nuestra verdadera esencia. Todos podemos acceder porque es nuestra verdadera naturaleza. Habla de la incosciencia colectiva en la que se encuentran todos los seres humanos que aún no han iniciado el viaje a su despertar espiritual, dónde hay una plena identificación con las formas (entre ellas los pensamientos) o lo que es lo mismo, el Ego. La identificación con el Ego supone el vivir "sin darse cuenta". El acto de reconocer es un camino para el despertar. No se puede luchar contra el Ego; la única forma de trascenderlo es hacerlo consciente. Escuchar el silencio es una forma de lograr la quietud mental que necesitamos para "Ser".

Bibliografía Recomendada: "Una nueva tierra" y "El poder del ahora", Eckhart Tolle.